Luego del empate ante Sarmiento en el inicio del Clausura, Atlético llegó a la cancha de Eclipse para jugar un partido de alto riesgo. Con el recuerdo del 2 a 2 electrizante del Apertura, los dos equipos se jugaban mucho para continuar prendidos en la tabla.
El DT Naranja, Daniel Balmaceda no sabe de especulaciones, sin Leonardo González ni Jorge Durán lesionados, optó por un 3-3-2-2, arriesgó con tres en el fondo, marcó con tres en el medio, y le dejó la pausa a Luis Papay y el vértigo a Sebastián Santos para que asistan a los de arriba.
En el comienzo, Eclipse lo presionó bien arriba, no lo dejó salir tocando y puso en evidencia algunos desacoples defensivos. Es que la potencia de Ariel Altamirano, la velocidad de Lucas Maldonado y el manejo de Luciano Peñiñores, llevaron al local hacia las cercanías de Adrián Azcona. Avisó el misno Peñiñores a los dos minutos con un disparo alto cuando estaba solo frente al uno Naranja, y respondió Atlético a los seis minutos con un cabezazo débil de Flavio Romero en el área chica.
Se hizo de ida y vuelta el partido, y, aunque el viento y el campo de juego complicaban el manejo, pareció que Eclipse estaba un poco mejor. Controlaba por momentos el medio con la marca de Marcos Martín y el oficio de Juan Falcón aunque sufría con los ataques por derecha de Atlético. Por ese sector se recostaban Santos, Alejandro Bottega y Raúl Gómez para buscar a Romero. Pero no llegaban las ocasiones de gol, el trámite se hizo deslucido y hubo que esperar hasta los 32 minutos para ver una ocasión de riesgo. Fue una buena contra del local que terminó en una gran atajada de Azcona luego de un remate de Maldonado que tenía destino de red.
El viento, que soplaba a favor de Eclipse, jugó su partido también y ayudó a la gran pegada de Horacio Arévalo en dos ocasiones. A los 43 minutos pateó el defensor central un tiro de libre desde la izquierda y la pelota cayó en el techo del arco y un minuto después, esta vez desde la derecha llegó la apertura del marcador. Otro tiro libre pasando la mitad de la cancha fue la excusa para que Arévalo marque el primero con un disparo que cayó en el área chica, no la tocó nadie y Azcona vio como se le metía muy cerca suyo.
Se fueron al descanso y la incógnita era como podría revertir el trámite Atlético y si Eclipse, en ventaja, se afirmaría en el dominio.
La respuesta llegó rápido, el Naranja se plantó en campo rival, se hizo dueño de la pelota y fue llevando al local contra su arco. A los dos minutos Roberto Palacio reventó el travesaño con un tiro libre muy bien ejecutado y las faltas para frenar a Santos le dieron chances a la visita.
Eclipse apostó a alguna contra pero no tenía la pelota y, con el correr de los minutos pareció sentir el cansancio luego de la presión del primer tiempo. Y se encontró en el fondo con un Julián Sallaber impasable que clausuró su sector y se fue arriba cuando pudo, gran trabajo de un lateral izquierdo silencioso y de perfil bajo. A partir de allí lo acorraló Atlético, impreciso muchas veces, pero sin renunciar al toque y la circulación que lo caraterizan, se acercó y forzó varios corners. Hasta que a los 24 minutos un mal puñetazo de Antonio Carreras para despejar un tiro de esquina dejó la pelota en el área chica y Romero no perdonó: la peinó y a festejar el empate.
Allí se vio lo mejor del Naranja, lo fue a buscar, presionó, corrió, ganó terreno y acorraló a La Maquinita contra su arco. Santos era imparable y Raúl Gómez también, el delantero luchó, corrió y metió como siempre, y le agregó una perla a su gran trabajo: acarició una pelota a los 44 minutos en un tiro libre delicioso para poner el 2 a 1.
El D.T. local, Luis Álvarez, jugó sus fichas con los cambios pero no tuvo tiempo, Atlético estaba más firme que nunca y no le permitió nada.
Gran triunfo de la visita, dio vuelta un partido muy complicado, mostró carácter, temple, determinación para no renunciar a una idea y superó a un duro rival en el juego, en lo físico y en lo anímico. Un hincha Naranja, afónico tras el triunfo lo resumió con la simpleza que el cronista no tiene: «Atlético lo quiso ganar y lo ganó».
El próximo domingo el Naranja recibe en su cancha a Ingeniero White de Banderaló que llega con dos jugados y dos ganados. Todo está igual que en el Apertura, el Rojo de Banderaló tiene 6 puntos y Atlético suma 4, promesa de gran partido en algo que ya es un clásico.
Síntesis:
Eclipse: Antonio Carreras; Agustín Luján, Ignacio Videla, Horacio Arévalo, Rodrigo Cano; Juan Falcón, Marcos Martín (c), Jonathan Tisera, Luciano Peñiñores; Lucas Maldonado y Ariel Altamirano.
Suplentes: Oscar Narpe, Lucas Nievas, Matías Ipisale, Gustavo Gallego, Miguel Arrieta, Luciano Mateo y Nicolás Echevarría.
Cambios: Matías Ipisale por Jonathan Tisera (28′ ST), Miguel Arrieta por Luciano Peñiñores (28′ ST) y Nicolás Echevarría por Agustín Luján (43′ ST).
Gol: Horacio Arévalo (44′ PT).
Amonestados: Marcos Martín y Jonathan Tisera.
D.T.: Luis Álvarez.
Club Atlético Ameghino: Adrián Azcona; Kevin Inzúa, Roberto Palacio (c), Julián Sallaber; Alejandro Bottega, Jesús Díaz, Ignacio Sinegub; Sebastián Santos, Luis Papay; Flavio Romero y Raúl Gómez.
Árbitro: Eladio Haedo.
Asistente 1: Héctor Díaz.
Asistente 2: Ariel Buffa.
Reserva: Eclipse 0 – 1 Atlético Ameghino
Juan Eliceche
Espacio Naranja
Prensa Club Atlético Ameghino
