El capitán de Independiente de América, que anunció su retiro al final de la temporada 2016, jugó su último partido en el estadio Anselmo Lobo. Previo al partido ante Fútbol Club recibió una plaqueta y un presente por parte de la comisión directiva.
Mario Rodríguez se despidió de su casa futbolística. El mediocampista central vivió muchísimos momentos dentro de ese campo de juego, donde se coronó campeón en repetidas oportunidades, y obviamente, también atravesó momentos en los que las cosas no fueron tan bien.
La tarde del domingo 30 de octubre no fue una más para Rodríguez, ni para la historia del «rojo». El último partido del «5» no fue el esperado debido al resultado adverso y a que él mismo estrelló un penal contra el poste, pero eso no opacará todas las alegrías que le ha dado a la parcialidad de su club durante su extensa trayectoria.
A los 37 años, el volante de Independiente decidió ponerle punto final a su carrera, y a partir de ahora sólo le quedan 2 partidos por delante: el clásico ante Atlético Rivadavia y el cotejo contra Fútbol Club, ambos como visitante.
Foto: Jorgelina Sebastián.