El domingo se volvió a vivir una desafortuna acción dentro de un campo de juego en la Liga del Oeste. Por fortuna, en esta ocasión no derivó en nada grave, pero igualmente desde Fútbol del Oeste optamos por escribir unas líneas para que tomemos conciencia.
Lamentablemente, en mayo del 2015 Maxi Gil sufrió un paro cardiáco dentro del campo de juego dentro de la cancha de Huracán de Carlos Tejedor y falleció días después. Aquella triste historia marcó, sin dudas, un antes y un después en el fútbol local y regional.
Aquella tarde, los médicos Karina y Javier Varela estaban presentes en el estadio, ingresaron al campo de juego, y le practicaron primeros auxilios al juvenil hasta la rápida llegada de la ambulancia.
Fue justamente por el velóz y correcto accionar de los profesionales mencionados anteriormente, que Máximo Gil pudo llegar con vida al Hospital de Carlos Tejedor, para más tarde ser trasladado hasta la localidad de Junín donde finalmente falleció.
Entendemos que no todas las localidades cuentan con más de una o dos ambulancias, por lo cual disponer de una durante 4 horas en un espectáculo deportivo haría que esta indispensable herramienta quede a contramano para el resto de la población. Es por eso que no solicitamos una ambulancia en cada estadio.
Lo que sí pedimos desde Fútbol del Oeste es la presencia de un médico en cada partido, tanto en divisiones inferiores, como así también en Sub 21 y primera.
El rápido accionar de una persona capacitada puede salvar vidas. Entonces, al haber un doctor en cancha, la situación será controlada rápidamente a la vez que la ambulancia llega hasta el estadio en cuestión.
La ambulancia no tardará demasiado en llegar al reducto desde el cual se la solicite, teniendo en cuenta que tienen prioridad para circular por la cinta asfáltica y también que las distancias a recorrer en las localidades donde se disputan partidos de la Liga del Oeste no son extensas.
En la tarde del domingo, cuando se disputaba la 2ª fecha del Torneo Apertura, en la cancha de Argentino de Carlos Tejedor se vivió un momento de tensión y nerviosismo cuando tras un rechazo de Jeremías Agudo (Gorra de Cuero) la pelota impactó en el rostro de Maximiliano Ustaris (Social de Tres Algarrobos) y el futbolista cayó desvanecido al césped.
Al no haber médico presente, ni ambulancia por el motivo ya explicado, quienes debieron practicarle primeros auxilios al futbolista lesionado fueron los propios protagonistas.
El pedido de la ambulancia fue instantáneo, pero curiosamente tardó más de 10 minutos en llegar hasta la cancha donde se disputaba el encuentro siendo que se encuentra a 4 cuadras.
Ante la demora, y al ver que Ustaris no reaccionaba, el pediatra Salazar y el doctor Orellana ingresaron al campo de juego para atender al jugador.
Por fortuna, Maximiliano Ustaris no sufrió heridas de consideración, y se encuentra en observación en el Hospital de Tres Algarrobos a la espera del alta médica.
Dos situaciones que se vivieron en menos de un año calendario, en donde actuaron médicos que estaban mirando los partidos, y brindaron auxilio de manera rápida y efectiva.
Por eso, reiteramos, pedimos que en cada cancha de la Liga del Oeste a la hora de comenzar un partido de cualquier divisional se cuente con la presencia de un profesional para que en estos casos pueda actuar rápidamente mientras se espera por la rápida llegada de una ambulancia.
Entendemos que esto podrá significar un gasto adicional para los clubes, pero desde el ente organizador y obviamente desde las instituciones que lo componen, se debe pensar en esto como una inversión para no atravesar situaciones desafortunadas.
Mejor prevenir que curar…