ECLIPSE NARANJA

El partido se dividió en dos partes bien diferentes, y esa división coincidió con cada tiempo. Arrancó a todo ritmo el partido, con el local buscando recuperarse de una derrota y urgido de una victoria. Apostó a un 3- 3-2-2 y tuvo ese viento a su favor en el inicio. Y a los cinco minutos obligó al arquero Adrián Azcona a una atajada tremenda cuando Lucas Maldonado lo fusiló desde el área chica.

La visita volvió a su esquema y priorizó un estilo conocido: un 4-3-1-2 y la salida limpia, circulación y elaboración. Sebastián Santos buscó todas y con su gambeta condicionó a varios. El enganche Naranja obligó a la falta permanente del rival y fue una preocupación constante. Raúl Gómez con su velocidad también marcó diferencias desde el inicio y estuvo a punto de abrir el marcador a los 10 con un cabezazo.

Atlético, con su juego asociado, comenzó a dominar las acciones y a sumar merecimientos. Eclipse, más vertical, apostó a la velocidad de Maldonado y a pelear en el medio con mucha gente. Y en esa lucha de estilos sacó ventaja la visita luego de una oportunidad fallada por Romero a los 15. A los 21 minutos Roberto Palacio ejecutó un tiro libre que el mismo Romero bajó de cabeza para la entrada solitaria de Jesús Díaz, que tocó al gol. Justicia en el marcador por lo hecho hasta allí.

Obligado, el local siguió con su libreto, pero no apareció el juego necesario para llegar al empate y comenzó a caminar por la cornisa. Se expuso a las contras y el partido se hizo friccionado, a Santos lo pararon solo con faltas y pareció que si acertaba el pase final, el Naranja gritaría el segundo. Azcona se lució otra vez ante Marcos Martín y un ratito después Santos disparó apenas desviado una jugada que armaron Gómez y Romero.

El complemento marcó el comienzo de un largo rato de imprecisiones, faltas y discusiones. Con Eclipse sin encontrar la forma de lastimar a su rival y con cambios que no aportaron demasiado. Su DT, Luis Álvarez, sumó gente del medio hacia arriba pero no tuvo respuesta y se expuso a las contras. Y lo que perdió Romero picando una pelota ante la salida de Antonio Carreras a los 9, lo concretó Gómez a los 20 tras una habilitación del propio Romero: 2 a 0 y toda la urgencia para el local. No varió el trámite, que pasó de enredado a malo. Santos no pudo hacer valer su habilidad, pero entró Luis Papay para manejar la pelota en el medio y a los 39 le sacó lustre a su botín: desde lejos colgó una pelota en el ángulo y el 3 a 0 sonó lapidario.

Pero llegaron, entre los 41 y los 43, esos dos minutos fatales que encendieron la ilusión de uno y las alarmas del otro. Maximiliano Rivero de emboquillada y Maldonado de cabeza acercaron a Eclipse y se jugaron cinco minutos de descuento a pura tensión.

Al final, festejó Atlético y el local disimuló un mal partido con dos contras que lo dejaron a tiro de un empate que no pareció posible por lo hecho hasta allí.

Con el triunfo y momentos de buen juego la visita alcanzó la punta del Decagonal que comparte junto a Fútbol Club Bunge y Juventud Unida. A este último recibirá el próximo domingo, con el objetivo de reafirmar la levantada.

Síntesis: