El clásico entre el ‘albirrojo’ y el ‘rojo’, por la 3ª fecha del Torneo Preparación de Fútbol Senior terminó 1 a 1, y ese resultado pudo haber sido otro si el árbitro del partido hubiese señalado la mano que le mostraremos en este video. ¡Imperdible!
El tanto de Mario Rupp había puesto en ventaja a Atlético Rivadaviaen el primer tiempo y el gol de Pedro Rubio señaló la igualdad definitiva en la mañana del domingo, en el estadio César Menéndez.
Los árbitros son seres humanos y conviven con el error, sobre todo porque tienen que tomar decisiones en cuestión de segundos y sin poder ver una repetición. Pero lo que sucedió en el clásico llamó muchísimo la atención.
Un tiro libre a favor de Independiente fue ejecutado por Javier Martín desde el sector derecho del ataque del ‘rojo’. La pelota se elevaba a poco más de media altura y cuando llegó a la barrera se desató la polémica: el primer futbolista de los locales que conformaba esa barrera saltó con sus brazos extendidos y desvió notoriamente la trayectoria del balón.
¿Qué pasó? ¡Nada! Ni el árbitro Néstor Mansilla ni el asistente que se encontraba en ese sector, quien debió haber visto perfectamente lo ocurrido, se percataron de esa escandalosa mano que, indudablemente, era penal. Al menos uno de los dos debió haber visto la infracción.
¿El resultado pudo haber sido otro? Sí, o al menos Independiente hubiese contado con una clara oportunidad a su favor para poder convertir.
Video: Deportes Uno – Rubén Oscar Holgado.
A esta polémica hay que sumarle lo ocurrido en otro partido, más precisamente en el que Unión terminó ganándole a Independiente de González Moreno por 2 a 1 en el estadio Hermenegildo Nieto.
Allí, primero el ‘rojo’ pidió un penal que parecía ser bastante claro en medio de una jugada en la que el árbitro del partido, Ariel Torrilla, entendió que no era así.
Ya en el segundo tiempo llegó la igualdad y una nueva polémica: un futbolista de Unión pateó, el arquero de Independiente de González Moreno tocó el balón que posteriormente dio en el travesaño y el referí tocó el silbato. Mientras todos aguardaban para ver qué iba a sancionar, incluso hasta los futbolistas de la ‘U’, Gabriel Fuentes aprovechó esa pelota suelta para mandar el balón a la red. El silbatazo previo quedó en la nada y el tanto fue convalidado.
