En las últimas horas se dio a conocer la noticia de que Social ha decidido no participar con las categorías formativas en los campeonatos del 2021, y como Independiente tampoco cuenta con estas divisionales, no habría fútbol juvenil en González Moreno.
La ausencia de ambos equipos en primera división, más allá de que llame la atención, puede plantearse y/o entenderse desde la cuestión económica que implica competir en dicha categoría.
Sin embargo, la falta de divisiones inferiores es una preocupación que va más allá de la competencia, porque justamente y valga la redundancia, en inferiores la prioridad no es la competencia.
Y va más allá de que sea fútbol, incluso. Se trata de la ausencia de un deporte, el cual brinda a los jóvenes un espacio recreativo, también la posibilidad de contar con el merendero, los valores inculcados a través de la práctica de una actividad, las amistades y los vínculos que se forjan, y demás cuestiones que llevan a la famosa frase ‘una hora en el club, es una hora menos en la calle’.
Uno de los puntos que llama la atención es que González Moreno cuenta con más habitantes que otras localidades en la que sus equipos presentan todas sus categorías, o donde incluso hay 2 clubes con presencia en inferiores.
Y otro tiene que ver con que no se haya logrado conformar un grupo de trabajo que pueda sustentar la actividad, es decir, que faltó gente que se acerque.
Sin dudas, esta determinación que se tomó en las últimas horas ha encendido las alarmas porque es un espacio deportivo y recreativo que, ojalá sólo sea momentáneamente, se cierra. Y esto va más allá de los nombres de los clubes o de una posible intervención o ayuda de parte del Municipio. Seguramente, cada una de las partes hará una evaluación de qué sucedió a lo largo de estos años y analizará porqué se llegó a esta instancia.
