En una fecha convulsionada por lo sucedido con entre los protagonistas y los árbitros, el D.T. de Los Once salió a cruzar a uno de los asistentes que estuvo en el partido de su equipo ante Atlético Rivadavia.
«La situación no era la mejor porque en Sub 21 recién dio 3 minutos de descuento cuando ya iban 47, y nos terminaron empatando. Los chicos estaban tristes por el resultado y ahí ya el referí les habló a ellos» empezó diciendo el entrenador de los seresenses.
Seguidamente siguió con sus declaraciones para contar lo que pasó en el partido de primera división: «Un defensor de Atlético le pegó una patada durísima a Andrés Rodríguez y le reclamé que tenía que expulsarlo, sin insultarlo ni nada. En ese momento, el asistente que estaba en ese sector lo informó al árbitro principal y me expulsó. Nadie entendió porqué me echó de la cancha.
Cuando estaba saliendo, el línea me dijo que somos un desastre. Textual, eh. Me decía: «Ustedes son un desastre. ¿Para qué reclamás, si van últimos? Ni tendrían que jugar».
«Una situación similar nos había pasado contra Independiente de González Moreno, también con árbitros de General Pico. Nosotros no reaccionamos y por eso no pasó nada, pero en su momento tuvimos que parar a un hincha porque un asistente le había dicho cualquier barbaridad. Es una falta de respeto hacia nosotros y también hacia los demás clubes, porque no somos los únicos a los que les pasa esto» remarcó más tarde el estratega de Los Once.
Pasando al plano futbolístico, Jorge explicó que «es un punto positivo, teniendo en cuenta cómo se nos estaban dando las cosas hasta el momento. Planteamos bien el partido y pudimos sumar ante un rival que siempre es difícil, sobre todo en su cancha».
«Ahora tenemos que seguir trabajando. Hay que continuar ajustando piezas y siendo inteligentes a la hora de jugar para poder remontar y pensar en una buena campaña en el Clausura» terminó diciendo Rosales, que se entusiasma con que el punto conseguido en América sea el punto de partida que necesita su equipo.
