El ahora ex director técnico de Independiente de América le contó Fútbol del Oeste los motivos de su renuncia a la dirección técnica del primer equipo del «rojo» y aseguró que tampoco continuará junto a las categorías formativas.
«Me llamaron los dirigentes y me plantearon algunas diferencias que tenían con mi forma trabajo, y a raíz de eso decidí dar un paso al costado» comenzó diciendo el «flaco» ante los micrófonos de este medio, para luego explicar cuáles fueron esas diferencias: «Adujeron que no se daban los resultados esperados por ellos, que estaban en desacuerdo con la forma de juego y que ciertos jugadores no estaban rindiendo. Ante todo eso nos sentamos a charlar, les dí mis explicaciones y dí un paso al costado».
Cifre tuvo su momento de reflexión y analizó esta etapa que le tocó vivir en Independiente: «El balance es bueno. Junto a Gustavo Constable habíamos presentado un proyecto de 3 años y no llegamos a completarlo. El primer año jugamos con todos chicos del club, en el segundo nos reforzamos en puestos claves para clasificarnos a la Liguilla, y en el tercero íbamos a apuntar directamente a pelear el campeonato».
«Me voy tranquilo. El objetivo era meter al equipo dentro de los 8 primeros y hasta hoy en día eso se está cumpliendo. Estoy convencido de que el plantel lo va a logar» remarcó más tarde el estratega, para luego desearle suerte a su sucesor: «Me va a reemplazar Alberto Figuroa, y quiero que le vaya bien. Por él, por los jugadores, y por la gente de Independiente».
Respecto a las divisiones inferiores, donde también estaba ejerciendo el rol de D.T., José manifestó que «tampoco voy a continuar con los más chicos, ya está todo hablado. Van a continuar Gustavo Constable y el ‘profe’ Ramiro Durán, al menos hasta fin de año estarán ellos. Hay cosas que te cansan, te saturan y uno tiene que estar al cien por cien en todo momento, por eso elegí alejarme».
En el cierre de la charla, el entrenador aprovechó para «agradecerle a los hinchas, jugadores, colaboradores, dirigentes, y a toda la familia de Independiente. Fueron 6 años de trabajo en los que me sentí como en mi propia casa».
