El joven defensor, quien fue el encargado de patear y convertir el penal que le dio el título a Jorge Newbery para volver a consagrarse tras 27 años, habló mano a mano con Fútbol del Oeste.
Se complicó en el final
‘Fue un partido tremendo. Arrancamos abajo y lo pudimos revertir rápido, creo que eso fue muy importante. Después ellos quedaron con dos menos y parecía que lo teníamos, pero hay que reconocer que enfrentamos a un rival muy duro que nos complicó y por un momento parecía que se nos escapaba. Pudimos mantenernos y lo sacamos adelante en los penales’.
Los penales le sientan bien
‘En la final de la Copa Rivadavia también me tocó patear el último y por suerte las dos veces entraron. Esta vez no estaba en la lista inicial de los cinco pateadores y me metí al final. Me tenía confianza, quería patear y mis compañeros me apoyaron. No pensé demasiado antes del penal, solo en asegurar que fuese gol’.
Está viviendo un sueño
‘No hay palabras para explicar lo que se siente en este momento, después de conseguir el título con esta camiseta. Es una sensación increíble. Le quiero agradecer a todos mis compañeros, al cuerpo técnico y a toda la gente del ‘celeste’ que están locos y nos bancan siempre. Lo que vivimos fue increíble, todavía no caigo de lo que conseguimos como equipo’.
