El defensor de 26 años que pasó por el fútbol pampeano y que recientemente fue presentado como refuerzo de Tigre, habló con este medio sobre su salto a la primera división del fútbol argentino. El partido por Copa Argentina que marcó un antes y un después en su carrera, cuándo arrancará a entrenar con el «matador» de Victoria, sus metas y un mensaje para los más pequeños.
Este marcador central de 1.88 de altura empezó a destacarse en All Boys con un ascenso a la B Nacional incluído entre 2008 y 2010. Más tarde pasó por General Lamadrid, ascendió nuevamente a la B Nacional pero esta vez con Atlanta en el 2011, y de allí pasó a Deportivo Español.
En La Pampa se dio a conocer entre las temporadas 2012 y 2014, cuando defendió los colores de Ferro Carril Oeste de General Pico en el Federal B y también jugó una liga para Estudiantil.
Su carrera siguió en San Jorge de Santa Fe, Villa Mitre de Bahía Blanca y previo a pasar a ser futbolista de Tigre estuvo en Pacífico de General Alvear (Mendoza).
¿Cómo surgió la posibilidad de pasar de Pacífico a Tigre?
Fue una verdadera sopresa, no me lo esperaba. El primer contacto fue el lunes posterior a haberle ganado a Estudiantes de La Plata por Copa Argentina, y no confiaba mucho en que esto prosperara. Trataba de ser cauto.
Con el correr de los días, cuando iba viendo que todo era más concreto y que se empezaban a cumplir algunas cosas que me decían, ahí empecé a creer y me puse un poco ansioso porque pasaron tres semanas de ese llamado inicial hasta que firmé el contrato.
¿Cómo viviste ese partido de Copa Argentina ante Estudiantes?
Fue un partido para el cual estuvimos preparándonos durante 2 meses de manera exclusiva porque el Federal B no estaba en competencia. Los días previos sabíamos que era muy difícil, pero cuando llegamos al hotel empecé a sentir que no íbamos a perder. No sé porqué, pero tenía esa sensación. Salimos a jugarnos la vida en ese partido, y se dio el resultado a favor nuestro.
Tu paso por Pacífico de General Alvear (Mendoza) terminó siendo muy breve.
Yo había arreglado para jugar Copa Argentina y Federal B, pero nunca llegué a jugar el Federal B: disputé 7 partidos de Copa Argentina y 2 o 3 de Liga local. Llegué en enero y me fui ahora en los primeros días de julio. Muchos meses, pero con poco rodaje.
Al Presidente le había dicho que estaba muy cómodo en el club y que no tenía pensado irme a equipos de Federal A o Federal B, al menos que surgiera algo como esto. La verdad es que no esperaba una oferta de esta relevancia, fue una locura por cómo se fue dando todo.
¿Cómo sigue tu vida de acá en adelante?
El miércoles arrancamos a entrenar y no quiero quedarme solamente con estar en un equipo de primera. En el fútbol todo pasa muy rápido, de hecho hace unos días lo único que quería era firmar con Tigre y ahora que ya se dio eso quiero entrar a la cancha y jugar. Siempre apunto a seguir progresando, y quiero demostrar que estoy a la altura.
¿Has hablado algo con Ricardo Caruso Lombardi?
Estuvimos hablando, pero nada en particular. Me demostró que había visto el partido ante Estudiantes de La Plata. Además, él conoce muchísimo del fútbol de ascenso entonces me iba preguntando sobre mi trayectoria y me nombró a varios compañeros que he tenido. La verdad es que sobre lo futbolístico no hablamos nada.
Cumpliste el sueño de llegar a primera división…
Hoy hablaba con mi mamá: ella sacaba la cuenta de la cantidad de jugadores que hay en el ascenso y los cupos disponibles para llegar a primera, y la verdad es que las posibilidades son mínimas. Me tocó a mí y trato de disfrutarlo. Todavía no caigo, creo que cuando arranque todo y vea el ambiente del fútbol de primera voy a empezar a darme cuenta de lo que estoy viviendo.
¿Cuál es tu objetivo en esta nueva etapa?
Como dije recién, arrancaremos a entrenar el miércoles y desde ese día voy a pelear por un lugar. Quiero ganarme la confianza de mis compañeros y del director técnico, empezar a sumar, y de ahí en adelante dar todo de mí para demostrar que puedo jugar en primera división.
¿Tu entorno reaccionó ante todo esto?
Están muy contentos, hasta te diría que lo están disfrutando más que yo, estaban muy ansiosos y son más efusivos. Ellos se merecen disfrutar de este momento porque son los que siempre me apoyaron y confiaron en mí, aún cuando las cosas no salían de la mejor manera. En el fútbol no son muchos los momentos que uno tiene para disfrutar, tengo la suerte de que me estén tocando varios seguidos, así que hay que aprovecharlos.
¿Por último, qué podés decirle a los chicos que sueñan con llegar al fútbol de primera división?
A los chicos les digo que la peleen siempre y que no se crean ni más ni menos que nadie. A mí me ha tocado jugar ligas locales, después Federal B, Federal A, Copa Argentina, y siempre fui la misma persona, entrené y me sacrifiqué de la misma manera en todo momento.
La clave es estar siempre preparado. A veces la vida no te da ciertas cosas porque todavía no estás listo, ya sea física, psicológica o deportivamente. Hay que estar listo y buscar las oportunidades para poder alcanzar lo que uno sueña.
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